El pasado pasa quería

Una de las frases que podían oírse en el Madrid de Antaño decía...:

"Quien no pasa por la Pasa, no se casa..."

En una sociedad como aquella, en la que -no existiendo la unión de hecho- todas las bodas debían pasar por vicaría, se hacía absolutamente necesario el acudir previamente por las oficinas del Arzobispado, con el fin de formalizar los trámites previos al matrimonio.

En el actual indicativo de la calle puede verse el dibujo de una cola, en clara alusión a quienes cada mañana esperaban turno para cumplimentar el papeleo necesario.

Por si les asalta la curiosidad de conocerla, la calle de la Pasa se encuentra a mitad de camino entre la Plaza Mayor y la de la Villa, dos lugares de referencia para el callejero de Madrid.

Han "pasado" los años y surgido nuevas formas de vida en pareja: algunas "pasan" de todo y se van sencillamente a vivir juntas, sin más preámbulos, otras sólo "pasan" de acudir a la sacristía y optan por una boda civil... Y aún así, aún no "pasando" por la Pasa, resulta que la vida "pasa"...