El Panteón Nacional de Portugal

El edificio se encuentra en la freguesía de San Vicente de Fora, en Lisboa, concretamente en lo que fue Iglesia de Santa Engracia. Iglesia desde el siglo XVI, reconvertida en Panteón Nacional desde 1916. 

Como viene siendo costumbre, para estos lugares, allí se encuentran los restos de aquellos portugueses que alcanzaron la distinción de ilustres y, con ello, el reconocimiento de sus paisanos, presentes y futuros. 

Por una cuestión de tiempo tan sólo visité los sarcófagos de: 

1/ Vasco de Gama, el navegante portugués por excelencia

2/ el de Luis de Camoes, padre de la lengua portuguesa

3/ y Amalia Rodrígues, la más grande fadista de todos los tiempos. 

Lamentablemente, en realidad y de las citadas, las dos primeras son cenotafios, al no contener los restos de la personalidad que anuncian, sino tan sólo sus recuerdos. 

Los demás residentes del templo fueron en gran medida Presidentes de la República o escritores, aunque conviene destacar que, aparte de Amalia Rodrígues, el futbolista Eusebio da Silva también constituye una gloriosa excepción a tal regla de vecindario. 

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El terremoto

 

Huelva también acabó siendo muy castigada por el terremoto que hasta ellos siguen llamando "De Lisboa", nos referimos al que tuvo lugar el día de Todos los Santos, del año 1755. 

Desde entonces se sabe que, en algún momento, el mar volverá a golpear con sus olas a la ciudad onubense; se desconoce cuando, pero es sabido que ocurrirá: existen registros geológicos que nos hablan de hasta 14 tsunamis letales en la zona, a lo largo de la historia. 

Es por ello por lo que el ayuntamiento de Huelva preparó un plan preventivo para evitar que vuelvan a producirse males mayores: señalando las zonas más altas y despejadas de la ciudad, en las que sus habitantes podrían sobrevivir, para después contarlo.

En España, la catástrofe se cobró 61 muertos por el terremoto y 2.000 por el posterior tsunami, mientras que las pérdidas materiales ascendieron a unos 600 millones de los actuales euros. Entre ochocientos y mil onubenses desaparecieron engullidos por la gran ola, y hablamos de lo que entonces era una costa infinitamente menos poblada que la actual.

Tras Huelva, otros pueblos y ciudades de la zona seguirán el ejemplo de la capital: a la postre, se trata de no repetir la historia...

Los veranos son azules

 

Han pasado unos 40 años desde que en 1981 se estrenase este producto televisivo, con tal éxito, que bien puede ser considerado como la serie de nuestra infancia...

La ciudad de Nerja (Málaga), fue el principal escenario de las aventuras de esta pandilla de amigos, y es por eso por lo que este ayuntamiento conserva algunos de los recuerdos de la grabación, como el famoso barco, que en realidad nunca existió más allá del montaje de un decorado.

En uno de los parques de Nerja se ha construido un modelo que lo recuerda, con la foto de su tripulación a bordo, a la que podemos ver en la siguiente imagen, ampliada...

La serie de Antonio Mercero cuenta las aventuras estivales de un grupo de amigos, los más veraneantes en Nerja, y cuyos nombres, recordémoslos, eran: Bea, Desi, Javi, Quique, Piraña y Tito. Otros, como Pancho, Julia y Chanquete, vivían habitualmente en este precioso pueblo de la costa del sol.

Del reparto cabe destacar a Antonio Ferrandis y a María Garralón, como los actores adultos que ya eran conocidos anteriormente.

En estos días terminaba la campaña electoral para las elecciones generales del 23 de julio de 2023, que acabaría ganando el PP, sin ganarlas. Su campaña, "verano azul", inspirada en esta serie, no se libró de arrancar con una cierta polémica, por lo que llegó a considerarse un plagio.

Hippotrip

Sin duda, uno de los atractivos turísticos de la ciudad de Lisboa, sería la posibilidad de auto convertirse en anfibio y dar una vuelta por tierra y mar, subidos a lomos de este portento de la tecnología: el Hippotrip.

El Hippotrip es un autobús que, tras un paseo por la ciudad, se introduce en el río y así, sin cambios aparentes, comienza a navegar por la desembocadura del Tajo, en el contexto de un recorrido que nos permite ver los más destacados monumentos de la Rivera (Los Jerónimos, la Torre de Belén, su famosa pastelería, el Mercado de la Rivera, la plaza del Comercio, el puente 25 de abril, etc...).

Una experiencia un tanto cara, aunque recomendable, por diferente e inusual. No se la pierdan.

NOTA: Para más datos sobre este viaje, pueden acceder a este directorio de vídeos y fotografías  sobre la aventura.

La Puerta de los Gordos

El Monasterio de Santa María de la Alcobaça, en la localidad que lleva este mismo nombre, es una abadía cisterciense que fue construida a mediados del siglo XII. Se encuentra en la parte central de Portugal, equidistante de Lisboa y Coimbra, en las fértiles vegas delimitadas y regadas por los ríos Alcoa y Baça.

Ambos ríos garantizaron el que fuese siempre el monasterio más rico y mejor surtido de Portugal, algo que se deduce tras visitar su impresionante cocina, en la que una amplia chimenea podría dar cobijo a unas 20 personas y cocinar, según el decir de las crónicas, hasta 6 bueyes a la vez. 

Por tales motivos sus monjes siempre llevaron una vida que se decía un tanto relajada, llegando a ser los más gruesos que se conocían en Portugal, hasta el punto de que hubieron de imponerse la necesidad de plantear una solución drástica. 

Dicen las crónicas que la que puede verse en la foto es la que se conoce como "Puerta de los Gordos", que comunica el amplio refectorio con la zona de Comedores, de manera que suponía un filtro por el que se quedaba sin comer todo aquél que no pudiera cruzarla. La puerta mide 2 metros de altura, aunque tan sólo 32 centímetros de anchura: las ayudas en la lucha contra el sobrepeso, ya existían en la Edad Media. 

Hoy este Monasterio es considerado una de las 7 maravillas de Portugal, siendo la Puerta de los Gordos una de sus principales atracciones.