La trayectoria del diseñador francés Louis Vuitton comenzó en el momento en que la emperatriz Eugenia de Montijo, la española que había desposado a Napoleón III, le eligió como proveedor oficial de maletas y equipajes.
Desde entonces fue consolidándose como uno de los máximos exponentes del lujo, hecho artículos de piel.
A sus diseños tradicionales, los que todos conocemos, la casa gusta de dar periódicamente otras opciones, con la pretensión de elevar su nada despreciable prestigio y su no menos interesante facturación.
En esta ocasión, las novedades vienen de la mano de la artista japonesa Yayoi Kusama, quien, con su paleta de colores, vino para alegrar este universo, casi siempre color marrón...
En las fotografías: la espectacularidad de la campaña publicitaria de la nueva línea, en puertas del edificio Vuitton, de la capital francesa... Una muestra más del como este pueblo, a todo sabe ponerle el lazo...
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