martes, 16 de agosto de 2011

Pagando Justos...

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Las placas "Visita C. Manzana" censaban a las viviendas en Madrid 
de cara a facilitar la recaudación de tributos...



Desde el coche de la Guardia Civil de Tráfico me indicaron que les siguiese.
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Tras abandonar la carretera nacional circulamos por una secundaria el tiempo necesario, hasta encontrar el lugar más indicado para una parada.
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-. Buenos días - me dijo llevándose la mano a la visera, en un saludo castrense al que nunca me acostumbraré-. Acabamos de comprobar que su vehículo no ha pasado la primera Inspección Técnica, a pesar de que excede los 4 años.
-. Ajá, ¿Y cuando me avisaron?. No recuerdo haber recibido ninguna carta...
-. No, no avisamos... Son 200 Euros de multa que se verían reducidos a 100 en el caso de que abonara la sanción en los veinte primeros días. Este otro documento le recuerda que dispone Ud. de 10 dias para pasar la inspección, ya que de no hacerlo podríamos dar de baja su vehículo...
-. Pues no me parece bien: deberían ustedes avisarnos. En mi caso puedo asegurarle que no me ocupé del tema por no haber sido consciente de las fechas: me paso la vida trabajando, una buena parte del tiempo para aquellos que prefieren meter la mano en mi bolsillo antes que un aviso en mi buzón... Son esos mismos, los que en campaña electoral gustan de llenármelo de propaganda inútil...
-. Las cosas son así: si no le gustan recopile firmas, monte un partido político y cambielas...
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-. ¿Puedo pasar la ITV en sábado?
-. No, al menos no en estas localidades. Sólo en jornadas y horarios laborales...
-. O sea, que habré de dejar de trabajar... ¿Y pagar la multa a través del banco?
-. Sí, a través del Banco de Santander.
-. ¿Únicamente?... ¡Qué derroche de facilidades!.

¡Indignante!... ¿Cuando querrán empezar a dejar de vernos como meros sujetos de recaudación o como a delincuentes potenciales, para dispensarnos el respeto y la consideración que merecen unos CIUDADANOS?...

Señor Rubalcaba... Ud. que parece estar recorriendo el país en un intento de volver a ganarnos con su demagogia de saldo: ¿De verdad que no supo ver como mejorar este enfoque, siendo Ministro de Interior?. 

Verá Ud. yo soy médico; cuando localizo a un paciente con el colesterol elevado -sirva el elemento de riesgo para ilustrar la comparación- le doy consejos, en algunos casos medicación, citándole siempre a los pocos meses para una nueva analítica ... Y por supuesto: de sancionarle: ¡ni pensarlo!, la sola idea me resultaría tan vergonzante, como cuanto le cuento debiera parecerselo a Ud...



lunes, 15 de agosto de 2011

Me lo trajo Pérez...

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En estos históricos momentos que hemos vivido y que se han caracterizado por la acampada, en la madrileña Puerta del Sol, de unos jóvenes que por indignados pretendíeron "enseñarle" los dientes al sistema, conviene recordar que a muy pocos metros de allí, la ficción del Padre Coloma ubicó la Residencia del que podrìa ser el mamífero con el mayor número de dientes del mundo: el ratoncito Pérez...

Luis Coloma, fue un jesuita escritor que en 1.902, por encargo de la Casa Real y con motivo de la caída de uno de sus dientes de leche, idearía un cuento para Alfonso XIII, nuestro entonces Rey-niño...

Poco a poco el personaje se fue abriendo hueco a modo de exitoso referente en nuestro nutrido acervo popular de hispanos, de manera que cuantos leemos éstas líneas hemos dejado alguna vez, bajo la almohada de nuestra cama y la advocación del famoso roedor, alguno de nuestros "mamoncetes" (dientes de leche), con la esperanza de madrugarnos con su correspondiente regalo.

El Autor ubicó la Residencia del ratón dentro de una caja de galletas Huntley, en los sótanos de la confitería Prast, que los Pérez regentaban en el número ocho de la céntrica calle del Arenal, lugar en el que hoy se puede visitar la Casa-Museo de nuestro personaje.



viernes, 5 de agosto de 2011

Don Jesús y el almendro

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"La tierra es insultada y ofrece sus flores como respuesta"
(R. Tagore) 
Leo esta cita de R. Tagore que me invita a rememorar una escena de mi infancia, un episodio que consigo vislumbrar con una nitidez que no resulta propia de un recuerdo tan añejo, en el que el empuje de mis 10 años apenas conseguía levantarme unos palmos del suelo... 
Aquella mañana, D. Jesús nos había leído unos versos de Salvador Rueda...
"Como el almendro florido
has de ser con los rigores,
si un rudo golpe recibes
suelta una lluvia de flores."
... Le sirvieron para disertar acerca de su significado y de cuan importante era el que, a lo largo de nuestras vidas y al igual que el almendro, respondiesemos a las adversidades con la amabilidad simbolizada por una lluvia de flores...
Don Jesús solía sentar a algún alumno sobre sus rodillas, para distraerse "acariciándole" durante las clases... Aquél día me había tocado a mí, motivo por el que sentía una mezcolanza de incomodidad y de asco que me resultaría difícil de describir y que me llevaba a perseguir, a buscar el medio -el que fuese- de aliviarme rápidamente de la situación.
En la solapa de su americana distinguí la cabeza de un alfiler que, sin pararme a pensar en las consecuencias, decidí clavarle y hundirle en el muslo.
En un quejido lastimero me arrojó contra el suelo; acercándose con los ojos inyectados de ira y esa furia que sólo puede aliviarse con la descarga de una violenta paliza, se disponía a levantar los puños cuando, desde mi actitud fetal y la desesperación propia de las circunstancias, grité lo primero que se me ocurrió y que habría de constituir mi salvación:
-. ¡Don Jesús!.. ¡Recuerde el almendro!.. ¡Sea como el almendro!...